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Judah Cohen | Director of Seasonal Forecasting at AER

Antes de comenzar quiero dar públicamente mi más sincera enhorabuena a Judah Cohen por ver con más de un mes de antelación la importante ruptura del Vórtice Polar  este Invierno 2017/2018 y sus consecuencias. Creo que aún no somos conscientes de lo que está haciendo Judah y el camino que está abriendo al campo de los pronósticos estacionales, enfocando la atención en lo que ocurre en latitudes altas y estudiando las teleconexiones. Está demostrando que lo que ocurre en latitudes altas tiene mayor importancia de lo que se pensaba hace años, y que la mejor comprensión de los patrones en esta zona nos puede hacer avanzar enormemente en los pronósticos estacionales. 

Os dejo un enlace a su Blog donde desde hace mucho tiempo realiza cada semana un duro trabajo analizando y exponiendo lo que bajo su punto de vista está sucediendo y sobre todo puede suceder en la atmósfera a gran escala. Meteorólogos de todo el mundo leen cada semana su blog para enriquecerse de sus análisis que ayudan a entender lo que sucede en el Hemisferio Norte.

Cuando haces un pronóstico toda información es poca, sobre todo si te encuentras en latitudes medias, donde las interacciones de masas se multiplican. Judah es un buen maestro para analizar si el Vórtice Polar puede estar preparando pulsaciones de aire frío sobre latitudes medias, que posteriormente provocan cambios muy importantes en las condiciones atmosféricas en superficie. 

Que se produzca una ruptura del Vórtice Polar no garantiza que en España tengamos un tiempo más inestable. Tan solo si es un evento importante, podemos estar seguros de que se van a producir desalojos de aire frío sobre latitudes medias, pero el Hemisferio Norte es muy grande y en muchas ocasiones nos quedamos sin ver ni lluvias ni temperaturas frías. 

En esta ocasión es más que evidente que las interaciones de las masas frías que se desprenden de latitudes altas con las cálidas y húmedas de zonas tropicales/subtropicales, están dando sus frutos en forma de un tren de borrascas con uno de los periodos más lluviosos de los últimos años. 

¿Pero que pasa con el Mediterráneo?

Como se suele decir nunca llueve a gusto de todos, y es que la dinámica atmosférica está favoreciendo la entrada de lluvias Atlánticas que si bien riegan la mayor parte del país, es cierto que llegan desgastadas al Mediterráneo. La explicación en muy sencilla. La humedad y precipitaciones que se inyectan desde el Atlántico sobre la península se va perdiendo poco a poco y los vientos llegan con menor aporte de humedad al Mediterráneo. Vivimos en un país con climas muy diferenciados y los tipos de lluvias y los mecanismos de "disparo" son diferentes en unas zonas que en otras. 

¿Qué va a suceder en los próximos días?

Pues Gisele va a seguir enviando bandas nubosas en las que tendremos precipitaciones que en algunos puntos vendrán acompañadas de fenómenos tormentosos y granizo.

En las imágenes de satélite destacamos en rojo la zona donde llegan líneas de chubascos tormentosos que van a seguir dejando un tiempo muy inestable. Por lo tanto, no te confíes si ves salir el sol. En pocos minutos podrán llegar chubascos tormentosos que incluso podrían venir acompañados de granizo y fuertes rachas de viento. 

Al mantenerse casi estacionaria y tener un amplio radio de acción, Gisele va a inestabilizar la atmósfera al menos hasta el próximo fin de semana, con nieve que podrá aparecer por encima de los 600-700m en el Noroeste y Cantábrico. Es posible que de forma puntual descienda algo más. En el centro y sur podría estar sobre los 800-1000m con desplomes puntuales. 

¿Y a medio plazo?

Pues Europa va a recibir en los próximos días una pulsación de aire muy frío que según la mayoría de modelos podría alcanzarnos a inicios de la próxima semana. Las mayores papeletas para recibirla por proximidad serán el cantábrico oriental y los pirineos, pero no se descarta en otras zonas. 

Podríamos volver a hablar de nieve en cotas bajas, incluso a nivel del mar, pero es muy pronto para valorar, ya que al igual que la última ocasión, vamos a quedar en línea de "choque" de la masa Continental y las borrascas que llegan desde el Atlántico. 

 

Lo iremos viendo en los próximos días. 

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